Este haz convergente se denomina "cono de Tyndall".
Bajo el microscopio, las partículas individuales aparecerán como pequeños puntos de luz borrosos que se mueven irregularmente.
Los puntos son inherentemente borrosos porque la dispersión lumínica produce imágenes más borrosas que las obtenidas con luz reflejada.
En 1902, Richard Adolf Zsigmondy —1865-1929— y Henry Siedentopf —1872-1940—, que trabajaban para Carl Zeiss AG, desarrollaron el ultramicroscopio.
[2] [3] En 1925 recibió el Premio Nobel de Química por sus investigaciones sobre los coloides y el ultramicroscopio.