[1] Las empresas Trek Technology e IBM comenzaron a vender las primeras memorias USB en el año 2000.Estos se promovieron como los «verdaderos reemplazos del disquete», y su diseño continuó hasta los 256 MB.También hay dispositivos, que aparte de su función habitual, poseen una memoria USB como aditamento incluido, como algunos ratones ópticos inalámbricos o memorias USB con ranuras para reconocer otros tipos de almacenes (microSD, m2, etc.).Los primeros modelos requerían una batería, pero los actuales usan la energía eléctrica procedente del puerto USB.Estas memorias USB son resistentes a los rasguños (externos), al polvo, y algunos hasta al agua, factores que afectaban a las formas previas de almacenamiento portátil, como los disquetes, discos compactos y los DVD.Las diversas distribuciones GNU/Linux también tienen soporte para estos dispositivos de almacenamiento desde la versión 2.4 del núcleo.Teóricamente pueden retener los datos durante unos 20 años y escribirse hasta un millón de veces.Aunque inicialmente fueron concebidas para guardar datos y documentos, es habitual encontrar en las memorias USB programas o archivos de cualquier otro tipo debido a que se comportan como cualquier otro sistema de archivos.El arranque desde la memoria USB está muy extendido en ordenadores nuevos y es más rápido que con un lector de DVD-ROM.Se pueden encontrar distribuciones de Linux que están contenidas completamente en una memoria USB y pueden arrancar desde ella (véase Live CD).Hay grabadoras y lectores de CD-ROM, DVD, disquetera o Zip que se conectan al puerto USB.Las unidades flash son una forma relativamente densa de almacenamiento, hasta el dispositivo más barato almacenará lo que docenas de disquetes, y por un precio moderado alcanza a los CD en tamaño o los superan.Esto significa que la mayoría de los sistemas operativos modernos pueden leer o escribir en dichas unidades sin controladores adicionales.Sin embargo las operaciones de escrituras serán cada vez más lentas a medida que la unidad envejezca.Esto debe tenerse en consideración cuando usamos un dispositivo flash para ejecutar desde ellas logiciales o un sistema operativo.Aunque la memoria USB no sufra daños, los ficheros afectados pueden ser de difícil o incluso imposible recuperación llegando en algún caso a ser necesario un borrado o formateo completo del sistema de ficheros para poder volver a usarla.[6] En Windows XP, puede darse el caso de que si la memoria USB no es desconectada utilizando la función de Extracción Segura, Windows automáticamente podría marcar dicho dispositivo como problemático y deshabilitarlo, y se da el caso de que dicha memoria puede utilizarse en otras computadoras pero no en la que está marcada como problemática.Hay que ingresar al Administrador de Dispositivos y volver a habilitarla.Se mantendrá el cableado interno de cobre para asegurarse la compatibilidad con las tecnologías USB 1.0 y 2.0.En USB 3.0, se aumenta la intensidad de la corriente de 100 miliamperios a 900 miliamperios, con lo que pueden ser cargadas las baterías a una mayor velocidad o poder alimentar otros componentes que requieran más potencia.
Lector de tarjetas SD, que actúa como memoria USB.
El dispositivo que aparece en la imagen es una memoria USB PNY Attaché de 128 MB. Como muchas de estas unidades, este modelo cuenta con una tapa extraíble (que protege el conector USB macho tipo A) y un orificio o bucle a través del cual se puede colocar una cuerda o un bucle de alambre (apenas visible en esta foto, en la esquina inferior derecha de la memoria USB).