τυπικα, typica; en eslavo eclesiástico: Тvпико́нъ Typikonə o Оуставъ, ustavə)[1] es el libro litúrgico que contiene instrucciones sobre la ordenación del oficio del ritual y sobre los himnos variables de la Divina Liturgia observado en la Cristiandad oriental: Iglesias ortodoxas e Iglesia católica de rito bizantino.
Egeria, una peregrina hispanorromana que visitó Tierra Santa alrededor de 381–384, escribía: La formalización de lo que se convirtió en la regla monástica bizantina comenzó con San Sabas el Santificado (439-532), quien registró el oficio tal como se practicaba en su tiempo en el área alrededor de Jerusalén, pasando lo que le había sido transmitido por San Eutimio el Grande (377–473) y San Theoktistos (c. 467).
El ordenamiento de los oficios era mucho más elaborado que en cualquier otro lugar, especialmente con respecto a Cuaresma y Pascua.
[6] En el Monte Athos todavía hoy tiene vigencia el typikon que encargó el emperador Juan I Tzimisces para dar una cierta flexibilidad a la vida monástica, tolerando la existencia simultánea de anacoretas y cenobitas.
[7] En la Iglesia Armenia, entre sus libros litúrgicos está el denominado Tawnac oyc' ("indicador de las fiestas"), que equivale al Typikon griego.