[1] Tomás Batista Encarnación nació y creció en Luquillo, una población localizada en la costa noreste de Puerto Rico.
Aunque su familia era humilde y la situación económica no era buena, logró finalizar la secundaria.
Allí encontró y comenzó a trabajar con el artista de origen gallego Ángel Botello (en).
En 1993, develó el monumento al cacique Loquillo que se encuentra instalado en su ciudad natal,[6] que fue encargado por la Comisión para la Celebración del Quinto Centenario del Descubrimiento de América y Puerto Rico.
Es conocido también por su trabajo en la restauración de altares, santos e imágenes religiosas que se encuentran en diferentes iglesias y en museos.