Las tierras de colores son determinados minerales o tierras que, una vez aglutinados, son usados en la pintura, como pigmentos para obtener diversos colores.
Otras bases son los pigmentos de origen vegetal o animal.
Las tierras de colores son tierras naturales sin manipulaciones o con manipulaciones mínimas como el secado para eliminar la humedad o el triturado para deshacer los grumos y obtener una textura pulverulenta.
No deben confundirse con los colores o pigmentos en polvo llamados "tierras", los cuales son, juntamente con los aglutinantes, uno de los ingredientes de los colores modernos para pintar.
Las tierras de colores más conocidas y usadas en la Historia de la pintura, automóvil, lacas cosméticas, electrodomésticos, plásticos, imprenta y cuero sintético[1].