Test de Bechdel

Se menciona por primera vez en el cómic Dykes to Watch Out For (DTWOF), obra de Alison Bechdel,[1]​ si bien la autora atribuye la regla a Liz Wallace.

[3]​ En la tira cómica The Rule, una de las protagonistas declara que solo está dispuesta a ver una película si cumple con los siguientes requisitos:[7]​[8]​ Una versión posterior exige que, además, las dos mujeres sean personajes con nombre, no simples figurantes.

La proporción de películas que supera el test aumenta cuando entre los guionistas hay, como mínimo, una mujer.

Por ejemplo, se ha dicho que la canción Baby Got Back de Sir Mix-a-Lot supera la prueba de Bechdel porque empieza con una chica que le dice a otra "Oh my god, Becky, look at her butt" [oh, Dios mío, Becky, mira su culo].

[18]​ En respuesta a su creciente omnipresencia en la crítica cinematográfica, el test de Bechdel ha sido criticado por no tener en cuenta la calidad de las obras que pone a prueba (las películas "malas" pueden pasarlo, y las "buenas" no), o como un "nefasto complot para hacer que todas las películas se ajusten al dogma feminista".

[22]​ El test de Bechdel suscitó una pequeña polémica en 2022, cuando la escritora Hanna Rosin lo invocó en un tuit para criticar la comedia romántica gay Fire Island.

Infografía sobre el test de Bechel: dos mujeres hablan entre ellas sobre un tema no relacionado con hombres.