Varios académicos han propuesto la teoría de los fundamentos morales como una explicación de las diferencias entre los liberales y los conservadores y han sugerido que esto puede explicar variaciones en la opinión sobre asuntos cargados políticamente, como el matrimonio gay o el aborto.
El trabajo de Kohlberg enfatiza en la justicia como concepto clave del razonamiento moral, considerándolo como una actividad cognitiva primaria, y la convierte en el enfoque dominante de la psicología moral, influenciando fuertemente en los trabajos posteriores.
La moralidad difiere porque las diferentes culturas utilizan los cuatro "bloques de construcción", que son proveídos en módulos diferenciados.
[8] Haidt argumenta que la matriz moral del libertarianismo se basa casi por entero en este sexto fundamento.
Las investigaciones revelan que la sensibilidad de las personas a los cinco fundamentos morales se correlaciona con sus ideologías políticas.
[2] Según Haidt, estos fundamentos pueden ayudar en gran manera a entender el discurso político y las relaciones sociales.
Los fundamentos destacados más por los conservadores (lealtad, autoridad, santidad) unen a los grupos para lograr una mayor fuerza en la competencia entre tribus mientras que los otros dos fundamentos (cuidado, justicia) equilibran esas tendencias con su atención a los individuos dentro del grupo.
[2] Estudios posteriores realizados en otras culturas han encontrado correlaciones similares entre moralidad e identificación política a las de los Estados Unidos.