Estas cartas consisten en tablillas cuneiformes, escritas en su mayoría en acadio, lengua diplomática internacional para este periodo.
El primer arqueólogo que excavó con éxito fue William Flinders Petrie en 1891-92, el cual encontró 21 fragmentos.
Émile Chassinat, entonces director del French Institute for Oriental Archaeology en El Cairo, adquirió dos tablillas más en 1903.
Estas tablillas arrojaron mucha luz sobre las relaciones de Egipto con Babilonia, Asiria, Mitani, los hititas, Siria, Canaán y Alasiya (Chipre).
En sí, el periodo que abarca la correspondencia comprende los reinados de Amenhotep III, Ajenatón, Semenejkara, Tutanjamón (Tutankamon) y probablemente Ay.
Lo mismo pasa con los vasallos del reino, quienes se dirigen con las fórmulas «Mi Dios», «El Sol», «El Gran Rey», etc.
Pero lo más probable es que existiera un archivo paralelo a las tablillas, en papiro e idioma egipcio.