Consta de tres tubos, excavados en diferentes momentos desde 1962 a 2007.
El tercero es reversible dependiendo de las condiciones del tráfico.
Los tres túneles carreteros están construidos paralelamente a escasos metros del túnel ferroviario de Tablada.
[7] Unas obras que, sin embargo, se realizaron mientras el Tribunal estudiaba el caso y posteriormente, una vez concluidas estas, dictaba sentencia.
Todo ello afecta de lleno a la localidad de San Rafael, cuya población lleva años protestando y demandando desde hace décadas una solución a la grandísima cantidad de vehículos que abarrotan y bloquean la travesía de la N-6 a su paso por la localidad, debido a que es la alternativa gratuita al peaje de la AP-6.