Suprema Junta Gubernativa del Perú

Se hallaba todavía en curso la ayuda que el Libertador del Norte, Simón Bolívar, a la cabeza de la Gran Colombia, había ofrecido al Perú para derrotar a los españoles.

A ello se sumó el hecho de que Juan Paz del Castillo recibiera instrucciones de su gobierno de no comprometer a sus fuerzas solo en caso de que el éxito estuviera garantizado y solo en el norte peruano, por lo que entró en conflicto con los intereses del Perú, que se enfocaban en atacar a los realistas del centro y del sur.

Dicho oficial colombiano retornó a su patria, en enero de 1823, disgustado al no lograr imponer sus condiciones.

Sin embargo, la Junta no pudo lograr el concurso del gobierno de Buenos Aires, abrumado por dificultades internas, y no otorgó al ejército que guarnecía Lima los medios necesarios para que iniciara oportunamente una ofensiva a la sierra central.

Tras este desastre militar, la Junta de Gobierno y el Congreso quedaron tremendamente desacreditados ante la opinión pública.

Se temió que las tropas realistas acantonadas en Jauja (sierra central peruana), pasaran a la ofensiva y reconquistaran Lima.

Estos sublevados estaban encabezados por el general Andrés de Santa Cruz.