Pronto surge, sin embargo, la necesidad de publicar nuevo material, así que la editora se asegura la colaboración de autores importantes como Franco Baglioni, que en 1947 realizó Frisco Bill con dibujos de Guido Zamperoni, y de su exmarido Gian Luigi Bonelli, que hizo lo propio el mismo año con Ipnos dibujado por Gino Cossio, Paolo Piffarerio, Andrea Da Passano, Mario Uggeri y Roy D'Amy.
En los siguientes años la editorial cambia varias veces de nombre (Edizioni Araldo,Cepim, Daim Press, Altamira) y adoptó un nuevo formato, que al estandarizarse se llamó "formato Bonelli": libros cuadrados, en blanco y negro, que presentan una larga historia que se extiende desde las 96 hasta las 300 páginas: una auténtica novela gráfica.
Su producción se vuelve además particularmente floreciente, sucediéndose personajes siempre nuevos con sorprendente velocidad.
(1950), Gordon Jim (1950) e Il Sergente York (1954), todos realizados por Roy D'Amy.
En 1961 fue estrenado Zagor, de Sergio Bonelli, una combinación del wéstern con otros géneros (aventuras, fantástico, ciencia ficción y horror).
En 1986, Tiziano Sclavi creó la serie italiana que más popularidad ha alcanzado durante las últimas décadas: Dylan Dog, un cómic de horror destinado a alcanzar por primera vez una tirada de 800.000 ejemplares al mes, gracias a un personaje muy original respecto a los antiguos héroes de Bonelli.
Tras el éxito de Dylan Dog, muchos editores han comenzado a publicar cómics en el histórica formato Bonelli, 16 x 21 cm con alrededor de 100 páginas en blanco y negro.