Imperios como el francés o el británico se desprenden de numerosas posesiones en África, Oriente Medio y Asia.
Estados Unidos vio una revolución cultural impulsada por el rápido desarrollo industrial y el consecuente fenómeno de consumismo.
Alemania y Japón experimentaron una sorprendente recuperación económica en menos de dos décadas después del final de la guerra, había transformado a ambos países en potencias económicas, si bien no políticas ni militares.
Por lo tanto, aunque Francia y Gran Bretaña tenían un mayor peso político, Japón y Alemania superaban a los dos países que obtuvieron la victoria en la segunda guerra e incluso su presencia en el comercio internacional superaba a la de la Unión Soviética.
[4][5] En esta década sobresalieron géneros musicales como el Pop y Jazz, no obstante a finales de esta década se inicia el rock and roll siendo popularizada principalmente por Elvis Presley, Chuck Berry y Bill Haley.