Las láminas delgadas o secciones delgadas son preparaciones que se realizan en rocas para su estudio con microscopio petrográfico, y que consisten en rodajas de la roca de un espesor de unas 30 µm que se adhieren a láminas de vidrio (portas) mediante resina epoxi, para posteriormente ser recubiertas por otra lámina de vidrio.[1] También se puede realizar esta preparación en sedimentos sueltos si previamente se les añade una resina que, al consolidar, se comporta como si fuera el cemento de la roca.[2] A mediados del siglo XIX ya se empleaban las láminas delgadas, y para 1860 la técnica para su elaboración se encontraba bastante desarrollada.[3] Se utilizan en distintas disciplinas como la micropaleontología,[4] la mineralogía o la petrología.Cuando se observa una lámina delgada al microscopio la luz atraviesa el polarizador y una vez polarizada atraviesa la lámina delgada y llega al analizador (si está activado) y luego al observador.