Tal como lo demuestran los diferentes testimonios histórico-documentales la «feria de Sumalao» en el Valle de Lerma tuvo grandes ejes económicos: primeramente las mulas y su enorme tráfico a Potosí que convirtieron a Sumalao en la principal feria de mulas del mundo entre principios del siglo XVII y fines del siglo XVIII[1] y, posteriormente, las grandes tropas de toros que se llevaban desde el valle, atravesando la quebrada homónima hasta las salitreras de Chile entre mediados del siglo XIX y principios del siglo XX, las que cruzaban íntegramente la Puna de Atacama.
Este floreciente comercio hizo posteriormente necesaria la planificación del ramal C14 del Ferrocarril General Manuel Belgrano; también de carreteras (actual Ruta Nacional 51) y la fundación del pueblo en territorio habitado desde hacía aproximadamente 4.000 años por atacameños.
Su ubicación es estratégica: desde tiempos inmemoriales por la quebrada del Toro (un camino natural obligado entre el océano Pacífico y la gran llanura Chacopampeana) ha sido el corredor de poblaciones humanas, corrientes culturales, mercancías y ganados de este a oeste y viceversa en esta región de América.
Todo el Tren de las Nubes fue construido por el estado nacional argentino siguiendo el Plan de Fomento que debía unir a todas las capitales provinciales y territoriales argentinas.
También se escancia caña quemada -o sino ginebra- con ruda macho macerada en la bebida espirituosa.