[3] A 2014, Silvestre Dangond recibía también una suma entre $COP 30 y 40 millones de pesos, sólo en saludos vallenatos, mientras que cantantes como Peter Manjarrés colectaban entre $COP 20 y 25 millones de pesos.
[3] Debido a la mala reputación, publicidad negativa o problemas de seguridad como amenazas que causaban los saludos vallenatos realizados por nombre propio a corruptos y criminales, cantantes como Jorge Celedón optaron por no practicar el saludo vallenato en sus grabaciones o presentaciones.
[1] Otros como Poncho Zuleta, eligieron nombrar sólo a sus fanáticos más conocidos,[1] mientras que los que continúan con la práctica optan por los apodos y nombres en clave de los personajes de poca monta.
[1] Los saludos vallenatos en campañas políticas se han convertido en un problema para las autoridades electorales en Colombia, ya que algunos artistas le hacen publicidad a un candidato mediante un saludo,[3] y se convierte en una manera popular de propagar el nombre del candidato mediante la llamada Mercadotecnia de guerrilla.
El ente encargado de velar por estas garantías es el Consejo Nacional Electoral (CNE).