Es un exconvicto, arrestado por albergar autos robados, que ganó su libertad después de derrotar al narcotraficante argentino Carter Verone con Brian O'Conner.
Luego de los eventos en Miami, se convierte en miembro del equipo de Dominic Toretto cuando Dominic, Mia Toretto y Brian planearon robarle dinero al corrupto empresario brasileño, Hernán Reyes.
Roman creía que Brian, desconocía su arresto, podría haber hecho algo para ayudarlo.
Pearce y O'Conner luego liman asperezas cuando el primero acepta trabajar en una operación encubierta para capturar al narcotraficante argentino de Miami, Carter Verone.
Cuando Dom le da la mesa, Roman aún no está del todo preparado, pero se le ocurre un plan para golpear la caravana desde el punto más seguro y físicamente inaccesible de la montaña como elemento sorpresa.
Sin embargo, todavía delega en Tej para pensar en la forma de llegar a ese punto.
Cuando el equipo va a la torre para sacar el chip del Ojo de Dios del coche, a Roman se le asigna una tarea sencilla para proporcionar una distracción si es necesario, en palabras de Tej, "brilla intensamente, como solo lo que puede hacer".
Lo hace secuestrando el escenario y llamando la atención cantando una canción de cumpleaños, atrayendo a los guardias del Príncipe hacia él, lo que les permite a Dom y Brian llegar al auto.
Cuando es interrumpido por Letty y Kara peleando, justo cuando los guardias están a punto de llevárselo, Dom y Brian los interrumpen conduciendo hacia el salón principal, justo cuando Deckard llega a la fiesta con un rifle de asalto.