Rockbitch

En el aspecto personal vivían como una comunidad poliamorosa situada en un antiguo monasterio reconvertido ubicado en una pequeña localidad cercana a la ciudad francesa de Metz, al que regresaban tras los conciertos —abierto a todo aquel que quisiera conocer su día a día: por ejemplo, el ganador del llamado «Condón de Platino» tenía derecho a pasar una noche en el mismo y tener sexo con Lucy, Babe y Nikki Fay—, por donde se movían sin ningún tipo de tabú y practicaban el «amor libre» con total desinhibición.

[7]​[6]​[8]​[9]​[10]​ Como miembros activas del movimiento feminista colaboraron a lo largo de su carrera artística en un buen número de grabaciones y proyectos, siendo galardonadas con el «Sex Maniacs Ball» (denominado posteriormente «Night of the Senses») instituido por la sexóloga y escritora británica Rosalind Mary Owens, más conocida como Tuppy Owens.

Tras su separación en 2002,[4]​ debida en buena parte a sus frecuentes enfrentamientos con la Policía (la propia Interpol intervino en ese momento para neutralizar su influencia), grupos ultracatólicos y otras fuerzas oficiales,[10]​[13]​ sus nueve antiguas componentes (Babe pasó a llamarse Alexandra) formaron el nuevo grupo «MT-TV» como un proyecto estrictamente musical, ya sin escenas de sexo ni desnudos totales,[3]​[10]​ si bien cabe señalar que incluso así algunos de sus conciertos fueron tildados de «vulgares y obscenos».

Dentro del más radical estilo punky las instrumentistas del grupo como Nikki Fay, Jo o Lisa Wills (Babe) utilizaban durante sus actuaciones botas altas, faldas extremadamente cortas, tangas, sostenes o arneses, todo ello confeccionado con correas de cuero u otros materiales, si bien en numerosas ocasiones solían deshacerse de los mismos hasta quedarse (Babe sobre todo) completamente desnudas.

Pero lo que sin duda las convirtió en una de las formaciones más transgresoras del panorama musical del último cuarto del siglo xx fueron sus inusuales puestas en escena a base de agresivos tocamientos de zonas erógenas como la vagina o los pezones, cunnilingus, penetraciones anales, sexo oral,[4]​ «lluvias doradas», masturbaciones,[7]​ fist-fucking (tanto con la mano como con cualquier objeto fusiforme), prácticas BDSM y comentarios soeces (en su estudio Forcenés du désir [2000] Christophe Boursiller destaca entre las primeras el momento en el que una de las componentes del grupo «orina sobre un cuerpo que gime en el suelo, loco de placer o de agonía»),[18]​ de fuerte contenido sadomasoquista y pornográfico (con rasgos satánicos), llegando incluso a realizar durante sus actuaciones en directo todo tipo de prácticas sexuales tanto entre ellas como con el espectador (indistintamente hombre que mujer) que en cada caso había conseguido atrapar el «Condón Dorado» que previamente habían lanzado,[6]​ lo que le daba derecho a tener sexo una vez terminado el concierto con una (la stage slut o «puta del escenario») o más componentes del grupo.

Nikki Fay (teclados, ninfomaníaca ).