Roberto Molina Barreto

Inició su carrera, en 1974, en el Organismo Judicial en donde se desempeñó como oficial auxiliar en los juzgados hasta 1980, a partir de ese año fundó su propia firma de abogados «Molina Barreto & Asociados» en la cual se desempeñó durante varios años en el ámbito privado.[3]​ Como abogado y constitucionalista, Molina participó en estudios, análisis y opiniones que se realizaron para iniciativas de reformas a las Ley Electoral y Ley de Amparo, Exhibición Personal y de Constitucionalidad, ambas dos leyes muy importantes de Guatemala.[2]​ Al año siguiente, en marzo de 2006, Berger lo designó como magistrado de la Corte de Constitucionalidad para el período que comenzaba ese año y terminaba en 2011, por lo que Molina Barreto presentó su renuncia al cargo de procurador general para poder asumir en la corte en abril de ese año.[2]​ En el año 2011 volvió a ser designado como magistrado de la Corte de Constitucionalidad, pero esta vez fue por la Corte Suprema de Justicia, durante este período firmó a favor de una resolución que anuló la condena hecha a Efraín Ríos Montt por supuestos delitos de lesa humanidad, bajo el argumento que el Tribunal Primero A de Mayor Riesgo no había resuelto una recusación planteada en contra de dos miembros de esa judicatura por el abogado defensor del acusado cometiendo un error de procedimiento; esta resolución fue firmada por Héctor Pérez Aguilera y Alejandro Maldonado Aguirre apoyando ese criterio.[10]​ En su ejercicio de abogado ha realizado varias publicaciones:[2]​