regiones); durante la Edad Media la palabra latina evolucionó a rejones, de la cual acabó en rione.
En torno al siglo XII comenzó a delinearse una nueva subdivisión en 12 partes, no por una imposición desde el alto (como en la antigüedad) sino simplemente por uso común.
Si bien las zonas eran distintas a las que existían en la antigüedad, se siguió usando el mismo término: regio en latín y rione en lenguaje vulgar.
Hasta entonces los límites entre un rione y otro no eran del todo claros, pues a menudo las casas se ubicaban en el centro del rione y las áreas de frontera se encontraban casi desiertas, haciendo innecesario determinar los confines.
En el año 1586 el papa Sixto V añadió un decimocuarto rione en la zona de San Pedro, al que se denominó Borgo.