Reproducción asistida en el cristianismo

Según la Instrucción Dignitaes Personae, publicado en 2008 por la Congregación para la Doctrina de la Fe: "Son en cambio admisibles las técnicas que se configuran como una ayuda al acto conyugal y a su fecundidad.

http://www.vatican.va/roman_curia/congregations/cfaith/documents/rc_con_cfaith_doc_20081208_dignitas-personae_sp.html Por eso se plantea como objetivo intervenir con leyes en el campo de la fecundación artificial, para contrarrestar la permisividad actual.

[2]​ Las enseñanzas de la Iglesia sobre la fecundación artificial dejan bien claro que el método técnico utilizado no puede sustituir al acto conyugal.

[4]​ Desde 1949 el Papa Pío XII condenó la inseminación artificial y en 1956 la fecundación in vitro.

[1]​ La inseminación intrauterina es aceptable si el semen se recolecta mediante relaciones sexuales, pero todas aquellas actividades que impliquen a una tercera persona están prohibidas.

[7]​ En 1997, el organismo European Ecumenical Commission for Church and Society, formado por iglesias protestantes, anglicanas y ortodoxas, señaló en un comunicado que entre sus miembros existían discrepancias en torno al tema de la reproducción asistida.

Según el obispo no todo el mundo en la iglesia anglicana ve actualmente la inseminación artificial con donación de semen como una intrusión violatoria de la integridad matrimonial ni como un acto de adulterio, dado que no hay encuentro físico y el esperma donado por un tercero no es más que un simple agente fertilizante.

Esta iglesia acepta la fecundación in vitro y la inseminación artificial de todo tipo pero no reconoce la maternidad subrogada.

[11]​ Algunas iglesias evangélicas consideran que no existe impedimento moral alguno para utilizar la reproducción asistida.

Con respecto a esto último, la iglesia también declaró que los anglicanos individuales pueden decidir no utilizar gametos de donantes si así lo creen conveniente.

Rechazan la maternidad subrogada así como todo procedimiento con espermatozoides, óvulos o embriones donados del mismo modo que no aceptan las transfusiónes de sangre.