[2] En 2017 Redwood Materials la fundó J. B. Straubel, que fue CTO de Tesla, Inc.
[12] Tiene como misión crear una cadena de suministro circular para vehículos eléctricos y productos de energía limpia, que los hace más sostenibles y reduce su componente más caro: las baterías.
Esto contribuye enormemente al coste total y a la huella de carbono.
A medida que más vehículos eléctricos alcancen su final aumentará el porcentaje de materiales domésticos para baterías.
Para 2030 esperaban aumentar su producción hasta alcanzar los 500 GWh, suficiente para cinco millones de vehículos eléctricos.
VP of Communications & Government Relations (Comunicación y relaciones con gobiernos): Alexis Georgeson.
Sus años fabricando baterías para coches eléctricos, que necesitaban cobalto, litio, níquel y cobre extraídos por todo el mundo, le hizo preocuparse por su disponibilidad a largo plazo y el impacto medioambiental.
[11] En hornos que alcanzan 1480 grados Celsius las baterías se convierten en un metal líquido.
Mediante otros procesos químicos se reduce el metal en formas altamente concentradas de litio, níquel y cobalto.
El proceso retira partes que no se pueden reciclar y neutraliza materiales peligrosos.
[16] De los muchos materiales presentes en las baterías, teléfonos móviles y aparatos electrónicos, Redwood Materials inicialmente se centró en reciclar: En 2018 la demanda aumentó un 25% hasta las 125 000 toneladas.
Las mayores reservas estaban en la República Democrática del Congo (50%), Australia (17%), Cuba (7%), Filipinas (4%), Canadá (4%).
Aunque el litio se encuentra en muchas rocas y salmueras naturales, la explotación comercial solo es posible en unos pocos depósitos con alta concentración.
Las reservas mundiales en salmueras y pegmatitas se calculaban en 2018 en 14 millones de toneladas.
Bolivia identificó recursos calculados en 9 millones de toneladas pero no tenía datos sobre sus reservas.
Hay cientos de minerales que contienen manganeso, pero solo diez tienen importancia para su explotación.
En 2020 se vendieron unos tres millones de coches eléctricos en todo el mundo (un 4.6% del total).