Rebecca Horn

La reflexión de Rebecca Horn gira en torno al cuerpo, su extensión y “maquinización”.

En la búsqueda constante de la multiplicidad del cuerpo, Horn se obliga para configurar un proceso creativo superior al anterior.

Dirigió las películas: Der Eintänzer (1978), La ferdinanda: Sonate für eine Medici-Villa (1982) y Buster's Bedroom (1990).

Horn vivió en Hamburgo hasta 1971, en Londres durante un breve período y desde 1973 en Berlín.

Durante esta etapa comenzó a crear sus primeras esculturas corporales elaboradas con madera y tela.

[2]​ Cuando Horn regresó a la academia de Hamburgo trabajaba con extensiones corporales acolchadas y vendas protésicas.

[6]​ Su tema es una mujer descrita por Horn como «muy burguesa» que tiene «veintiún años de edad y preparada para casarse.

Estas correas son casi idénticas a las lucidas en el cuadro de Frida Kahlo titulada Columna rota.

Si el participante elegido permanecía en medio de la habitación, podían tocar con exactitud las paredes opuestas al mismo tiempo.

«Mi sentido del tacto queda tan trastocado que el comportamiento diferente de cada mano suscita sensaciones contradictorias».

Vivir en Alemania después de la Segunda Guerra Mundial afectó en gran medida al gusto que tomó por el dibujo.

También ha colaborado con Jannis Kounellis y produjo algunas películas, incluyendo el film Buster's Bedroom (1990) con Donald Sutherland.

La estrella herida (1992), Paseo Marítimo de la Barceloneta, Barcelona .