Se celebró entre el 28 y el 30 de octubre y contó con quince tramos sobre asfalto sumando un total de 358.75 km cronometrados.
La FIA exigió que la seguridad fuera superior, debido a la cantidad de público que había en los últimos años y obligó a un único punto de asistencia, con lo que la organización del rally decidió cambiar su ubicación, que era en Gerona desde el 2002, y lo trasladó a Salou, en Tarragona, con la base en el aparcamiento de Port Aventura.
Sébastien Loeb ganó,[4] logrando la décima victoria de la temporada, seguido de su compañero François Duval y del finlandés Mikko Hirvonen, que lograba el primer podio en su carrera con un Focus privado.
La actuación de Hirvonen impidió a Citroën lograr un triplete, al apear del podio en el último tramo al español Pons que finalizó cuarto.
Con todo, la marca francesa festejó el campeonato de marcas y el campeonato junior que había logrado el español Dani Sordo con su Citroën C2.