Rafael Berenguer Coloma, único hijo del matrimonio formado por Rafael Berenguer Castillo y Luisa Coloma Salavert, nace en el distrito de San Vicente, calle Palomar n.º 6, 2º piso, en el popular barrio del Carmen.
Cultivó preferentemente el paisaje, la pintura de género, el retrato y mostró gran predilección por los temas religiosos.
Un año más tarde, su cuadro Cuevas del Parro, es galardonado por el Círculo de Bellas Artes.
Es de destacar la exposición realizada en los salones del Ateneo Mercantil Valenciano en 1932, junto a María Labrandero García y Luis Díaz Foxá.
Finalizada la guerra civil, pintó nuevamente dos obras para la asolada iglesia de San Lorenzo: un fragmento de la Santa Cena, y un altar completo, que actualmente no se conserva.