El lado izquierdo es mucho más llano y sus arroyos de menor longitud aportan bastante menos caudal al cauce.
El perímetro de su cuenca alcanza una longitud 73 km por lo que son varios los términos municipales por donde se extiende su red fluvial (todos en la provincia de Segovia), pero en lo referente al cauce principal y con las diferentes denominaciones observadas, este discurre por los siguientes: Carabias, Navares de Enmedio (como límite del término), Encinas, Fresno de la Fuente, Grajera, Boceguillas, Barbolla, Aldeonte y Sepúlveda.
"Sin duda alguna, los parajes más peculiares se localizan en las zonas en las que el río atraviesa litologías carbonáticas (calizas, dolomías, margas...) donde, por la naturaleza de éstas, la verticalidad de las paredes del valle contrasta notablemente con su fondo plano.
"[9]"El resto de los ríos y arroyos con depósitos fluviales también los desarrollan por la margen izquierda a excepción del río Ayuso que lo hace por la derecha.
Esta llanura se pierde a media que se acerca a su confluencia con el Duratón, es decir al llegar al bloque mesozoico.
Por otro lado, la verticalidad de las paredes origina desprendimientos, algunos muy recientes todavía observables en determinados puntos.
Es significativo señalar que el 61,5% de los torrentes no colgados desembocan en tramos rectos del cañón.
Así el fondo de lo que queda de ellos aparece colgado a diversas alturas, aunque principalmente entre 40 y 60 metros respecto al fondo aluvial del cañón (Tanarro, 2006); proceso que se ha observado y se ha denominado «captura por extensión de meandro» (Díez et al., 1996).
Asimismo, es significativo destacar que los barrancos colgados en la margen interna, en su mayoría obsecuentes, presentan un salto que se sitúa en torno a los 30 m, cuya explicación resulta más difícil de interpretar, aunque podrían relacionarse con posiciones heredadas del lecho.
Estos depósitos tienen una gran pendiente y pueden ser todavía funcionales en épocas de grandes lluvias."