Qutuz

[7]​[8]​[5]​ Estos, tras ocupar Damasco, se habían apresurado a enviar contingentes para apoderarse de Naplusa y Gaza.

[4]​ Qutuz, hombre maduro y enérgico, parecía más adecuado para afrontar la amenaza mongola.

[7]​ En respuesta, Qutuz los mandó ajusticiar,[4]​[6]​ medida que se tornó habitual en los intercambios diplomáticos posteriores entre mamelucos y mongoles.

[7]​[6]​ Incluso los mamelucos Bahri, acaudillados por Baibars, se reconciliaron temporalmente con el sultán para luchar contra los invasores.

[8]​[6]​ Para cuando la vanguardia egipcia venció a la del enemigo apostada en Gaza —que casi no resistió el embate—,[8]​[6]​ puede que Qutuz mandase unos cien mil hombres, aunque de calidad muy desigual.

[12]​ Baibars derrotó nuevamente a los supervivientes en Beit She'an, en donde habían tratado de reagruparse.

[12]​ Siria quedó en manos de Qutuz,[16]​ que permaneció en ella organizando su administración y repartiendo mercedes a sus seguidores.

Hulagu y sus soldados en una miniatura medieval persa. Su conquista de Siria que comenzó a finales de 1259 precipitó la toma del poder en Egipto por Qutuz.