Los quiloazas fueron un pueblo indígena que a la llegada de los primeros exploradores españoles en el siglo XVI se hallaban en la República Argentina en el centro de la provincia de Santa Fe sobre el río Paraná en torno a la laguna Setúbal.
El río San Javier fue denominado río de los Quiloazas y junto a él se fundó la primitiva ciudad de Santa Fe.
Formaban parte del grupo de los chaná-timbúes (o grupo del Litoral), los que geográficamente se agrupaban en: Se los cree emparentados con los guaycurúes ya que sus restos arqueológicos evidencian influencias amazónicas.
[1] Diversas fuentes coloniales los mencionan como altos y bien formados, se sabe que superaban los 1,70 m de talla promedio.
[2] Generalmente se considera que integraban la familia lingüística de los arahuacos.