Se consideran clásicamente bacterias comensales debido a su amplia presencia en el cuerpo humano y su rara participación en infecciones.
Todas las especies, excepto P. masssiliensis fermentan un rango limitado de carbohidratos como sacarosa o lactosa [4].
Las comunidades microbianas intestinales a menudo contienen especies del género Bacterioides o Prevotella, pero no ambas [5].
La abundancia de estos dos géneros se relaciona con la dieta del huésped, la autoinmunidad y otros fenotipos importantes [7].
Las especies de este género son comensales en las superficies mucosas humanas, como la microbiota vaginal [7].