Pericoronaritis

[1]​ Está caracterizada por la inflamación del tejido blando que rodea el diente retenido.

Esta enfermedad es producida por el crecimiento bacteriano activo en un medio ideal, que es el espacio de tejido blando que cubre la corona del molar.

Debajo de la mucosa peridentaria existe un espacio donde hay humedad, tibieza, protección, alimentos y oscuridad, con tal ambiente el crecimiento bacteriano florece.

Su origen infeccioso se produce a partir de los elementos infecciosos que circulan por la sangre o de los que ya existen en la cavidad; se admite actualmente que el punto de partida de la infección se sitúa en el espacio pericoronario: el saco que rodea la corona forma una cavidad virtual que puede infectarse al ponerse en comunicación con el medio bucal, bien directamente, por penetración a nivel del saco pericoronario.

Cuando una pieza dental está por erupcionar, en la encía se produce una presión y una falta de espacio.