Pozo La Muela se caracteriza por tener gran cantidad de senderos y rutas para realizar andando, en bicicleta o en caballo.
Son frecuentes y populares por sus usos medicinales, especies como la manzanilla, tomillo, la ajedrea, el romero o el espliego.
La gran extensión del municipio y la variedad de sus ecosistemas propinan una fauna muy diversificada que abarca desde mamíferos (erizo, tejón o comadreja, liebre, conejo, ardilla y lirón) a aves rapaces (águila real, perdiz, codorniz).
Estos miradores son ideales para observar las estrellas debido a que podemos ver el cielo completo con total oscuridad.
Entre sus infraestructuras destacan sus dos estaciones de esquí: Valdelinares y Javalambre ambas del grupo Aramón.
Es una comarca que vive del turismo durante todo el año, en invierno por estas dos estaciones y en verano por el turismo termal y de interior gracias a su cercanía a la ciudad de Valencia.
Sobresaliendo por encima del casco urbano, observamos los volúmenes de la maravillosa Iglesia barroca construida en el siglo XVII.
La iglesia parroquial está bajo la advocación del santo que da nombre al pueblo.
El castillo perteneció a la Baronía de Escriche y fue construido probablemente en el siglo XV.
Fue propiedad del barón de Escriche, quien la cedió en 1865, siendo renovada al año siguiente, cuando se restauraron los arcos.