Pero a diferencia del ciberpunk, las obras de esta categoría supuestamente se caracterizan por tener personajes que actúan para mejorar las condiciones sociales, o al menos para proteger el statu quo de la creciente decadencia.
En 1998 publicó un artículo titulado Notes Towards a Postcyberpunk Manifesto (Notas dirigidas a un manifiesto posciberpunk) en la revista Nova Express; al año siguiente publicó el artículo en el sitio web sobre tecnología Slashdot.
Algunos de los autores a los que se les ha aplicado esta etiqueta la han adoptado.
Sin embargo en otros casos la clasificación es complicada: hay demasiadas obras que exploran los temas posciberpunk pero desde un punto de vista distópico.
Otros autores son de difícil clasificación, como es el caso del Greg Egan, demasiado original como para clasificarlo en movimiento o subgénero alguno.