No debe confundirse con la paraqueratosis, que es otra entidad dermatológica diferente.
Este hallazgo explica la existencia de un borde periférico elevado en las lesiones, cuando se observan a simple vista.
[24] A veces, diferentes formas de la enfermedad se asocian entre sí y aparecen conjuntamente.
[11] Se ha observado también, en pacientes inmunosuprimidos, que la malignización es más precoz e invasiva, con tendencia a metástasis.
[25][26][27] Entre los principales factores de riesgo para el desarrollo de la enfermedad se incluyen la predisposición genética, la exposición a la luz ultravioleta, la inmunodepresión y el tratamiento con algunos fármacos.