La industria fue nombrada sucesivamente a través de los regímenes políticos, manufactura real, imperial y nacional.Todavía en actividad, sigue fabricando los objetos creados desde 1740, aunque su producción en el siglo XXI está en gran medida orientada hacia una estética contemporánea.El pabellón central está precedido por una tribuna, cerrada por una gran verja de hierro forjado.Las innovaciones más importantes fueron los colores de fondo y el uso del biscuit para pequeñas esculturas.[6] La fábrica se distinguió también por la creación de pequeñas esculturas o estatuillas realizadas en biscuit realizadas en color blanco, los artistas se inspiraron en escens galantes y pastoriles derivadas del pintor François Boucher, fueron modeladas por escultores como Jean-Jacques Bachelier o Étienne-Maurice Falconet.[9] Estos trabajos provienen de las observaciones efectuadas en diferentes fábricas establecidas en Alemania, especialmente en Sajonia.Durante todos estos años se realizaron numerosas innovaciones técnicas y la colaboración de artistas contemporáneos.[13] Los cánones estilísticos del Imperio napoleónico conferían una uniformidad en las formas y en la decoración de las piezas.Objetos decorativos como candelabros, columnas, relojes, muebles o cofres para joyas fueron obras habituales.[17] En 1875, la fábrica se trasladó a edificios especialmente construidos por el Estado francés, bordeando el parque de St.Continuando desde entonces la producción siempre en estos lugares, clasificados como Monumento histórico de Francia.Estuvo en funcionamiento hasta 1753, fecha en que se prohibió a las mujeres trabajar en la fábrica.La alta uniformidad de calor en el horno y enfriamiento extremadamente progresiva explica estas cualidades.Fue necesario casi un año de trabajo en todos los talleres para fabricar y decorar las piezas.[21] La apertura del horno como demostración de su utilización, se transmitió en directo por televisión.Aparte de estas cocciones excepcionales, la fábrica utiliza hornos eléctricos para toda su producción actual.Al constituirse la nueva sociedad de la manufactura, en la que Luis XV era el principal socio, se concedió el uso como marca la del monograma real: dos letras L entrelazadas, en este monograma se añadía una letra siguiendo el orden alfabético que indicaba el año de producción, en el que el primer año 1753 llevaba la letra A y B para 1754 y los años siguientes las sucesivas.