El ruiseñor estrellado presenta un amplio espectro de llamadas que varían geográficamente.Es un pájaro territorial en la época de cría, y suele poner hasta tres huevos en un nido cubierto.El ruiseñor estrellado está emparentado con los papamoscas, pertenece a la subfamilia Saxicolinae, un grupo que anteriormente se clasificaba en la familia Turdidae, pero que en la actualidad se clasifica dentro de la familia Muscicapidae.Además los cantos son diferentes según las subespecies, y en particular hay dos tipos de llamadas tipo pitido que tienen una distribución fragmentada en el área de distribución y entre las diversas subespecies.La subespecie nominal tiene la cabeza gris pizarra, con una mota blanca en el lorum frente a cada ojo y otra en la garganta.[4] La subespecie pallidiflava es como la nominal, pero con un amarillo más claro en el pecho y vientre.La subespecie intensa es bastante diferente, tiene tonos broncíneos en la espalda, el obispillo amarillo y bordes gris pizarra en las plumas de vuelo.La subespecie hygrica es como la nominal pero con la espalda de un verde musgo más saturado; y la subespecie transvaalensis es como hygrica con las partes inferiores amarillo anaranjadas y un borde plateado en las plumas de vuelo.Finalmente chirindensis tiene la espalda de un color verde amarillento más intenso.El primer tipo, propia de intensa, ruwenzori, guttifer, orientalis y la especie nominal, es una llamada disilávica, «tu-twii».[4] El ruiseñor estrellado se alimenta principalmente de insectos y frutos.Otros restos encontrados incluyen arañas, moscas, orugas, anfípodos, hemípteros, avispas, saltamontes y ciempiés.El nido suele estar bien escondido, generalmente en un terraplén pegado a un tronco o roca, pero algunas veces se sitúa en terreno plano sobre un tronco podrido, una roca o un promontorio de tierra.La construcción del nido dura unos siete días,[4] y es realizado solo por la hembra.
El bosque húmedo y los bordes de los bosques son los principales hábitats del ruiseñor estrellado. Este bosque del
monte Kilimanjaro
es el hogar de una subespecie endémica.
cuco solitario
suele parasitar los nidos de ruiseñor estrellado.