Fue construida en 1901 y su nombre es en honor al político e historiador Benjamín Vicuña Mackenna.
Años más tarde, en 1607, se construyó una ermita en honor a San Saturnino, patrono de la ciudad ante los sismos que la afectaban.
La toma del cuartel fue evitada, y el coronel insurgente Pedro Urriola murió durante el enfrentamiento.
En la obra, Vicuña Mackenna se encuentra sobre un pedestal de granito rojo, sujetando un lápiz en su mano derecha y unas hojas en la izquierda.
[8] La plaza se encuentra a un costado de la Avenida Libertador General Bernardo O'Higgins, entre el cerro Santa Lucía y la Biblioteca Nacional.