Con el hotel se abrieron también las primeras ramblas de madera y pronto las mujeres y los hombres más adinerados de Argentina quisieron concurrir a la “Playa del Bristol".
Es en esa rambla donde se paseaba la poeta argentina Alfonsina Storni, antes de internarse en el Océano Atlántico para no volver a ser vista.
En 1939 la Rambla es demolida, mientras que comienza la construcción del Casino, el paseo tal cual como se conoce actualmente y el Hotel Provincial.
Esto hizo que el turismo en la playa llegara a cifras inalcanzables hasta ese momento.
En la actualidad la Playa Bristol ha sido “adoptada” por la clase media y baja, por su proximidad al centro y a los grandes hoteles como por su infraestructura, mientras que las clases más adineradas se han trasladado a playas más apartadas en la parte sur de la ciudad.