Piedigrotta

[1]​ Delante de esta galería, según una larga tradición basada principalmente en el Satiricón de Petronio, había un sacelio dedicado al dios greco-romano Príapo, en el cual se oficiaban ritos sagrados y misterios religiosos en honor de esta divinidad.

Además, durante un breve periodo (siglos i-ii d. C.) se añadió también el culto del poeta Virgilio, oficiado por el poeta Silio Itálico en su tumba.

[2]​ La fiesta de Piedigrotta vivió su máximo esplendor entre finales del siglo xix y la segunda mitad del siglo xx, cuando se convirtió en el escaparate de la música napolitana junto con el Festival de Nápoles.

Piedigrotta ocupa una pequeña zona del primer municipio.

El barrio cuenta con abundantes zonas verdes, con unos 258 000 m² de parterres.

La galería de Piedigrotta a principios del siglo xx (foto de Giorgio Sommer).