Pecorino romano

La elaboración del queso pecorino romano ya se describe por primera vez en los autores latinos como Varrón y Plinio el Viejo hace casi 2.000 años.Este queso cubrió sus necesidades nutricionales dándoles fuerza a los fatigados soldados, porque su alto contenido en proteínas, grasas y sales, era una inyección de energía fácil de digerir.Luego, cuando la parte sólida se retira de las formas o canastas, se debe colocar en un ambiente fresco y oscuro, para que no pueda descomponerse, en mesas lo más limpias posible, y rociar con sal triturada para que exude el líquido."Su sabor fuerte y salado hace que sea empleado en la elaboración de salsas, en especial aquellas de origen romano, tal y como la bucatini all'amatriciana.Desde 1996 el pecorino romano tiene una denominación de origen protegida (DOP) ante la Unión Europea.