Si el contenido moral de los derechos fundamentales debe convertirse en profundas convicciones, no basta con el mero proceso cognitivo.
[4] Al término de la Segunda Guerra Mundial, en una Alemania agobiadia por el oprobio que le proporcionaba la memoria del nazismo, se elabora la noción de patriotismo constitucional como un patrotismo sustitutivo del que los alemanes no podían ejercer por su relación con un pasado insoportable.
[6] Con todo, Ciudadanos ―partido liberal de centroderecha― y el Partido Popular ―partido del espectro conservador español― han reivindicado con esta noción la identidad unitaria española frente a los nacionalismos periféricos.
[7] Así, el sentido con el que lo usa la derecha española es diferente al originario de Habermas, pues se orienta para excluir de la confrontación democrática el derecho a la autodeterminación en los territorios con fuerte sentido nacionalista no español: para el centro y la derecha nacionalista en España, el patriotismo constitucional implicaría que la Constitución española de 1978 no se puede alterar en los aspectos relativos a vertebración territorial del Estado.
[8] El patriotismo constitucional ha sido promovido en Guatemala para la recuperación y fortalecimiento del desarrollo.