El interés ecológico y paisajístico de este espacio, así como su fragilidad son los motivos que han llevado a su conservación mediante la declaración de espacio protegido.
La inundación de determinadas zonas se debe a que es una zona deprimida porque no existe ningún curso fluvial continuo que aporte agua al parque, aunque si existen diversos manantiales de agua dulce que contribuyen a mantener inundadas algunas zonas durante todo el año.
El parque posee un típico clima mediterráneo con influencia marítima.
La avifauna es muy variada, destacando entre las nidificantes la canastera, el aguilucho cenizo, el carricerín real, la cigüeñuela, el avetorillo o la focha común.
Las aves invernantes también son reseñables destacando el cormorán, el aguilucho lagunero y el martín pescador.