Embalse del Porma

Su construcción sumergió por completo los pueblos de Vegamián, Campillo, Ferreras, Quintanilla, Armada y Lodares y afectó de forma parcial a Utrero y Camposolillo que también fueron expropiados, ya que la mayor parte de sus terrenos se sitúan en zonas anegadas por el pantano.La construcción de la presa y embalse condenó también al aislamiento de otros pueblos como Rucayo o Valdehuesa, que quedaron comunicados con la carretera principal por un estrecho camino de tierra,que se asfaltó en los años 80 y se amplió a principio del siglo XXI.En 2017 se realizó una exposición en la Fundación Cerezales Antonino y Cinia sobre el impacto que tuvo la presa en la comarca[1]​ Inaugurado en 1968, tiene una capacidad de 317 hm³, suficiente para regar 45 000 ha.Es conocido también como embalse de Vegamián o pantano del Porma.En la salida del túnel y en el muro de la presa se inició en el año 2000 la construcción de dos minicentrales hidroeléctricas, operativas desde el año 2006.
Presa del embalse