Palmerín de Oliva

Según indica su continuación Primaleón, su autor fue Francisco Vázquez, vecino de Ciudad Rodrigo, aunque otros han atribuido su composición a "una señora Augustobrica" y a Juan Augur de Transmiera.

El niño recibe ese nombre porque es hallado a poco de nacer entre palmas y olivas, en una montaña llamada Oliva, por un colmenero llamado Gerardo, que lo cría.

Enterado por Diofena, mujer de Gerardo, de las circunstancias del hallazgo, el joven Palmerín parte a Macedonia, donde su padre Florendos, sin conocer su identidad, lo arma caballero.

Tras acabar varias aventuras en la montaña Artifaria, se enamora de la bellísima princesa Polinarda, hija del emperador de Alemania, y se desposa secretamente con ella.

Después corre diversas aventuras en Babilonia, alternadas con algún que otro episodio amoroso, y finalmente se casa con Polinarda y asciende al trono imperial de Constantinopla.

El libro pasa por alto Platir y continúa la acción del Primaleón.

7) Clarisol de Bretaña (quinta y sexta parte del Palmerín de Inglaterra, impreso en 1598), del portugués Baltasar Gonsalves Lobato.

8) Crónica de Don Duardos de Bretaña (primera, segunda y tercera partes, manuscritas, sin data), del portugués don Gonçalo Coutinho, conservado en 17 manuscritos.