Palacio Savassona

[2]​ Tras la muerte del patriarca en 1787, su hijo y heredero José Francisco Ferrer de Llupiá siguió con las obras, que completó con la nueva fachada, en 1796.[3]​[n.

[5]​ En 1864 los nuevos propietarios encargaron a Elías Rogent una reforma del palacete, incluyendo una ampliación con dos fincas contiguas de la calle Bot.

[6]​ En 1872, los hermanos Serra se repartieron las propiedades que tenían en común, quedándose José con el palacio.

[12]​ En esta actuación se restauraron las pinturas de «El Vigatà», recuperando algunas obras ocultas por intervenciones posteriores.

[1]​ Se accede al edificio por la calle de la Canuda, desde una entrada para carruajes, actualmente destinada a proyectos expositivos.

Inicialmente formaba parte de un patio a cuerpo descubierto, actualmente cubierto mediante un lucernario.

[14]​ Del mismo arquitecto es el ascensor modernista, uno de los primeros instalados en Barcelona, que todavía conserva su aspecto original.

Excepto la renovada sala Joaquim Borralleras, el resto conserva su aspecto tradicional, destacando las columnas y cristaleras, diseñadas por Jujol.

En la parte posterior del entresuelo se encuentra el jardín de estilo romántico, formado por varios parterres geométricos.

Está presidido por un estanque con una pequeña fuente, donde anualmente se recrea la tradición del «L'ou com balla».

L'ou com balla en los jardines del Ateneo.