Los Padilla fueron señores de villas como Padilla de Arriba, Coruña del Conde, Calatañazor (Soria), Mejorada, Santa Gadea, Novés, Mascaraque (Toledo), Villaveta, Pinós y Beas; así como condes de la Mejorada, Santa Gadea y Casa-Padilla, y marqueses de Valdefuentes, Santa Fe de Guardiola y Puerto Berrio.
En el siglo XV, consiguieron patrimonializar el importante cargo de adelantado mayor de Castilla, título que, en el siglo XVII, debido a diversos enlaces matrimoniales, acabó integrándose dentro de la casa ducal de Lerma y, ésta, en la casa ducal de Medinaceli.
Probaron los Padilla su nobleza en las órdenes de Santiago, Calatrava y Alcántara, así como en la Real Chancillería de Valladolid y en la Real Compañía de Guardias Marinas.
A pesar de ser un apellido español, debido a los desplazamientos históricos de los originarios a distintos países, el apellido Padilla se ha expandido.
Por ejemplo en México, Puerto Rico, República Dominicana, entre otros.