Pablo Cabrera

Aprendió las primeras letras en la Escuela Sarmiento de San Juan, con el maestro Vicente García Aguilera.

Otro tío suyo, Fray Domingo Venancio Mercado, habría muerto en olor de santidad en Santa Fe el día 16/02/1896.

Esos tres años los transcurrió en Mendoza, con su madre y hermanos domiciliados allí.

Afuera del Colegio de las Esclavas se comenzó a granjear prestigio como orador e historiador.

En 1887 disertó sobre el General José María Paz; en 1892, publicó un artículo sobre los sacerdotes que vinieron a América con Cristóbal Colón; en 1893, defendió a Manuel Belgrano contra Adolfo Saldías, e historió sobre los orígenes y vicisitudes del Hospital San Roque.

En 1899 inauguró con un extenso discurso la Tercera Exposición Artística del Ateneo de Córdoba.

También adquirió gran prestigio como orador, dando discursos que impresionaban a la audiencia.

En 1905, cesó de dar sermones y discursos por una afección a la garganta (faringitis), aunque luego Cabrera declaró que fue por decisión propia el dejar la oratoria.<.

Además, ya antes de 1925 había recorrido a caballo o a pie, estudiando en detalle comarcas del Valle de Punilla, Cruz del Eje, Candelaria y muchas otras.

[3]​ En su modesta casa, aledaña a la Iglesia del Pilar, Cabrera reunió una valiosísima colección de estatuas antiguas, telas, cuadros, muebles, mosaicos, muebles, armarios, fotografías, libros, mapas y documentos.

1911 – Nuestra Señora de Copacabana; Tesoros del Pasado, tomo I (educación en la colonia).

1913 a 1915 – Dos páginas sobre Arte Colonial; estudio sobre la Ciudad del Barco; noticias bibliográficas sobre el Padre Muriel; un trabajo sobre Ignacio Duarte y Quirós.

1917 – En colaboración con el Dr. Enrique Martínez Paz, publicó un volumen de las Coronas Incas.

1926 - Tesoros del pasado argentino; Estudios históricos y geográficos de Tucumán.

1934 y 1935 - Introducción a la historia eclesiástica del Tucumán, 1535-1590 (2 tomos); Universitarios de Córdoba.