Pablo Calvo

Tras el éxito de la producción, tanto en las pantallas nacionales como internacionales, la productora Chamartín lo contrató para otras dos películas: Mi tío Jacinto (1956) y Un ángel pasó por Brooklyn (1957), ambas dirigidas también por Ladislao Vajda e interpretada esta última por Pepe Isbert y Peter Ustinov.

Se convirtió, junto con Joselito, en la estrella infantil de la época.

En 1963 viajó a la Argentina para actuar en el filme argentino Barcos de papel, junto con Enzo Viena, Alberto Olmedo, Ubaldo Martínez, Alita Román, entre otros.

[1]​ Tras este último largometraje, y al no poder superar con éxito la barrera de la adolescencia en el mundo del cine, optó por la retirada.

Entonces, estudió Ingeniería Industrial, profesión que compaginó con la actividad empresarial en la localidad de Torrevieja, donde se estableció con su esposa y su hijo, a partir de 1986, y donde regentó varios negocios relacionados con la hostelería y con la promoción de viviendas.