[4] Estudios realizados sobre productos ofrecidos a los culturistas han mostrado un 42% de los mismos con escasa información científica o mensajes confusos, siendo tan solo un 21% de los productos ofrecidos acompañados con una información fiel y detallada[1] Se puede decir que ya desde los juegos olímpicos en la antigüedad en la antigua Grecia (776 a. C. - 392 d. C.) se tenía preocupación por la alimentación de los atletas lo que indica su conocimiento incipiente sobre nutrición deportiva.
La nutrición culturista anterior a estos años se fundamentaba más entre los rumores que circulaban entre los culturistas que en los detalles científicos investigados en la nutrición, de esta forma se mencionaba que la carne de caballo era estupenda para el crecimiento del músculo, superando a otras en rendimiento.
Autores y culturistas como Mike Mentzer se dedican en los años ochenta a divulgar las enseñanzas del entrenamiento de alta intensidad en el que se vigilaba además la dieta como un elemento esencial en la práctica del culturismo,[4] algunos métodos posteriores tomaron las ideas de Mentzer como es el caso del entrenamiento hipertrófico específico (a veces como HST del inglés Hypertrophy Specific Training).
Esto supone comer a intervalos de cada dos o tres horas.
[1] Los carbohidratos, su ingesta y su rápida absorción en los procesos metabólicos, son importantes en deportes aeróbicos debido a la larga duración de su práctica (por ejemplo un maratón dura varias horas), mientras que en deportes anaeróbicos la importancia de su asimilación es relativa y se reduce a una adecuada 'carga' mediante un adecuado plan alimenticio.
[13] No obstante se ha encontrado un límite en 5 g/kg/día debido a la capacidad que tiene el tracto intestinal de absorber la proteína y del hígado de procesar ciertas cantidades, se han observado daños al organismos si se mantiene una ingesta prolongada superior al 35% de la energía calórica.
Este tipo de ácidos grasos se encuentra en los pescados azules tales como el atún, la sardinas, el salmón, etc.
Se tiende a creer que cuanto más carbohidratos mejor pero esto no es cierto del todo.
Los alimentos que poseen hidratos de carbono se asimilan de formas diferentes por el organismo, a esa asimilación se le denomina en nutrición como índice glucémico (véase también carga glucémica).
Algunas vitaminas y minerales son interesantes por tener efectos antioxidantes como es el caso de la vitamina C y E, el betacaroteno, el selenio y los compuestos fenólicos, etc. todos estos antioxidantes aunque no mejoran el aspecto ni el rendimiento deportivo, se ha demostrado son efectivos en la lucha contra cánceres y algunas enfermedades,[23] así como mejora de los procesos de control de grasas en el cuerpo.
[25] Se dividen, desde el punto de vista nutricional, en dos grupos: las que son solubles en grasa como pueden ser las vitaminas A, D, E y K, o aquellas que son solubles en agua como la vitamina C o las del grupo B.
La suplementación de minerales a veces es practicable en culturismo, sobre todo cuando no se cubren los niveles diarios aconsejables o se quiere evitar periodos de deficiencia tras los entrenamientos.
La actividad muscular es termogénica y con ello se produce un aumento de la temperatura en ciertas zonas del cuerpo.
[27] Durante un ejercicio aeróbico intenso se pueden llegar a perder cerca de dos litros de sudor por hora, este ritmo hace que se deba vigilar la deshidratación durante la práctica del culturismo.
En algunos casos se debe evitar en ciertas dosis la cafeína (café) debido a su potente efecto deshidratante contraindicado en el ejercicio anaeróbico, siendo además un bloqueante de la absorción de ciertas vitaminas.
Otro alimento que debe quitarse o reducirse es el sodio, que habitualmente se toma en forma de sal común como ingrediente en las diversas comidas o alimentos: es decir salazón.
[30] Como suplemento de carbohidratos se emplea a veces la maltodextrina que posee un alto índice glucémico (denominada a veces como 'carbohidratos en polvo') que se suele preparar en batidos ingerido tras las sesiones de entrenamiento como carga de carbohidratos.
Supresores del apetito para mantener el ratio grasa/músculo controlado como puede ser el 5-hidroxitriptófano (5-HTP) y el triptófano,[31] En un apartado más polémico están los esteroides que están prohibidos en muchos países así como en la práctica profesional del culturismo, la función principal de los mismos es provocar la hipertrofia muscular vía una modificación de los niveles hormonales que intervienen en el metabolismo anabólico muscular.
[32][33][34] Algunas soluciones intentan ayudar en la metabolización de los tejidos grasos, con la intención de mejorar la entonación y el perfilado de los músculos, es por esta razón por la que se emplean ciertos suplementos como el quitosano, el denominado gugul, etc. Algunos productos termogénicos general serios problemas para la salud en algunos casos, tales como la efedrina.
Existen en algunos casos intentos de sustituir o enriquecer una dieta en los denominados MRP (del inglés Meal Replacements Products).
Algunos de los alimentos adoptados por los culturistas vegetarianos pueden ser frijoles, baked beans, hummus, tofú, quorn, proteína texturizada de vegetales (abreviada a veces como TPV del idioma inglés: Textured Vegetable Protein), soja, coco, leche de arroz, seitán y algunos otros productos.
Algunos culturistas veganos pueden llegar a necesitar suplementos de vitamina B12 y D. Existen corrientes nutricionales que establecen diferencias entre la nutrición entre varones y mujeres en lo que respecta a la práctica del culturismo, en los casos del culturismo femenino existe la creencia de que se debe promover la musculación vía de la nutrición.