Fue descubierta en 1815 en la región volcánica de Eifel, en el estado de Renania-Palatinado (Alemania), siendo nombrada así en honor de Karl W. Nose, mineralogista alemán.
[1] Sinónimos poco usados son: nosealita, noselita o nosita.
Es un alumino-tectosilicato con anión adicional de sulfato, del tipo feldespatoide, con catión sodio, hidratado.
Se forma en fonolitas —rocas volcánicas alcalinas— deficientes en sílice.
Suele encontrarse asociado a otros minerales como: sanidina, mica, leucita, magnetita, ilmenita, titanita o zircón.