Debido a su forma esférica se le suele llamar queso de bola.
La maduración se produce durante el almacenamiento a una temperatura que oscila, preferiblemente, entre 10 y 20 °C.
También puede presentarse como bloque prismático con las caras cuadradas o rectangulares y sin corteza.
El Edammer envejecido es frecuentemente servido con las "frutas de queso" como son las peras y las manzanas.
En países caribeños como Curazao y Venezuela se elabora una receta llamada queso de bola relleno[3] que suele consumirse mayormente en Navidad.