La población destaca asimismo por su bien conservada arquitectura tradicional y por su exclusiva contribución a la cocina montenegrina con el queso Njeguški sir y el Prosciutto Njeguški pršut (Prosciutto de Njeguši).
[2] Njeguši da nombre a la tribu que consiste en los asentamientos Dugi Do, Žanjev Do, Herakovići, Kopito, Vrba, Rajićevići, Velji and Mali Zalaz, Majstori y Mirac, y forma parte de Katunska Nahija, una de las provincias del Viejo Montenegro.
El nombre tribal de Njeguši procede, según el historiador Ilarion Ruvarac, del latino Negusius Podcupica, mencionado en un documento del siglo XI.
El descenso a Kotor, desde unos 900 m de altitud, se realiza mediante una serpentina, carretera que zigzaguea a los largo de 26 cerradas curvas que están numeradas.
Al fondo, una curva muy famosa en forma de M cierra el descenso hasta la bahía.